vago

siempre como animal vagando por las mismas rectas, diferentes lineas,
paseando como villano en el mundo de blando, saltando,
los dueños de los deseos juegan a tirar las riendas,
domando el caballo, dejandole marcas en el cuerpo.

luces y sonidos de una misma oscuridad, aullando a la luna,
se vomita lo desechable en una marca reconocida para compartir,
el baile de siempre opacado por lo vil,
para llegar a marcar un terreno que no tiene ni tu fin ni mi delfin.

un paseo de cuerdas, vibrando cuando los labios arden,
circulos de abrazos cuando el pecho se aplasta,
ser agua encuadrada en un vaso,
lejos del aire mortal.

cruzandose con sombras, de noche mas gordas, bajando la mirada cuando se asoman,
saludando de mano bajo el sol morado, manteniendo la herida escondida,
hablar de mas para equivocarse bien,
arrojar un caballo de mar a los brazos de una sombra al revez.